ENTREVISTA A GEMA GÓMEZ DE SLOW FASHION SPAIN

Gema Gómez
Conocimos el proyecto de Slow Fashion Spain en la redes sociales, nos enganchó y nos propusimos conocer a su fundadora personalmente en cuanto pudiésemos. Ese momento no tardó en llegar-organizaba un debate/coloquio enGreenLifeStyle, una conocida tienda de ropa sostenible de Barcelona- y no podíamos faltar.
Cuando conoces a Gema Gómez enseguida te das cuenta de que le apasiona lo que hace y tiene la virtud de contagiar esa pasión de manera muy natural a quién le escucha.
Gema Gómez se ha convertido en la persona de referencia en España en lo que a moda sostenible concierne. Y no es por casualidad, se lo ha ganado a pulso con su trabajo incansable, positivismo a prueba de crisis y firmeza en sus principios.
Hemos decidido realizarle una entrevista para poder dar a conocer al mayor número de personas este maravilloso proyecto que comparte con Biobuu los principios de la moda ética y sostenible.
Hola Gema, cuéntanos ¿cómo surgió el proyecto de crear una plataforma para la divulgación de la moda sostenible?
El proyecto surgió uniendo tres de los ámbitos que más me definen, os cuento: 
Desde pequeña me encantaba la moda y me gustaba crear. Tal era la pasión que tenía que de mayor me llevo de mayor a convertirme en diseñadora. Estuve en París 6 años en el Instituto de Tendencias y posteriormente en Madrid en diferentes grandes cadenas en las cuales adquirí muchas experiencia en la moda. Allí me di cuenta de las barbaridades ambientales y sociales que hay detrás del Fast FAshion
Otro de los ámbitos que siempre me ha atraído es el tema de la formación, de desarrollo personal, de las posibilidades de desarrollarnos, por eso también me formé en PNL y coach.
Y por último está el tema de la ecología y la sostenibilidad del cual siempre he sido muy consciente. Es como una especie de respeto a la vida, creo que hay la misma energía en todos los seres vivos ya sea una persona, animal o planta, que se expresa de manera diferente en cada uno de ellos pero que estamos obligados a respetar.
Uniendo estos tres ámbitos surgió Slow Fashion Spain, y nuestra misión es divulgar y asesorar a diseñadores y profesionales de la moda que quieran crear sus prendas de manera responsable.
¿Cómo ves la situación actual de la moda sostenible en España?
Estamos en un momento muy interesante. Desde hace año o año y medio el tema se está acelerando o lo hemos acelerado para bien. Muchos de los proyectos que hasta el momento estaban medio escondidos, ahora están saliendo. Es evidente que actualmente en el contexto de crisis, los proyectos están costando muchísimo más que si no fuese así y eso hace el desafío aún mayor. Pero sí que es verdad que la gente que está saliendo están con muchas ganas…con muchísimas ganas de trabajar y que tienen muy claro su objetivo porque lo tienen muy interiorizado. Y es gente que yo los calificaría de héroes porque van a tener que luchar contra toda una cultura de consumismo que está muy implantada.
¿Crees que la crisis puede estar ayudando a que la gente tenga una conciencia mayor del consumo insostenible que se ha realizado en los años de bonanza económica?
Yo creo que no es tan directo. La crisis está ayudando a que la gente se empiece a cuestionar diferentes decisiones que se han realizado en varios ámbitos: políticos, ambientales etc. y poco a poco está llegando al entorno del consumo. Nos estamos convirtiendo en consumidores responsables un poco de manera forzada, ya que los ciudadanos que antes compraban de manera desaforada, ahora se ven obligados a comprar de una manera más sostenible. Creo que este cuestionamiento irá llegando con el tiempo, pienso que con ayuda de todos los movimientos sociales y ecologistas que existen la gente poco a poco se concienciará.
¿Qué deberíamos hacer para concienciar a la gente de que deben comprar ropa
sostenible.?
Yo creo que sobre todo lo que hay que hacer es explicar muy bien en qué consiste la moda sostenible, hablar de ello para concienciar a la gente. Todos podemos ser agentes del cambio y es importante que llegue a la gente los datos reales que se mueven con el Fast Fashion, pero aún lo es más saber transmitir los valores, la belleza de la cosas bien hechas e ilusionar con los proyectos que se están gestando.
En nuestro video de promoción, hablábamos de las sensaciones que te procura una prenda hecha con algodón orgánico  ¿de qué manera podemos transmitir a nuestros hijos que existe otra forma de consumir más sostenible?
Debemos ser muy conscientes de que nuestros hijos aprenden lo que nosotros les enseñamos. Por eso es importante saber transmitirles de que existe otra manera de consumir. Que hay que respetar, que no se debe contaminar el aire ni la tierra, que esta última está muy ligada a nuestro destino. Que para ser felices no hace falta tener tantos bienes materiales, tenemos que enseñarles a saber disfrutar con las cosas más cercanas a ellos, con las cosas más simples, como puede ser su hermano o algún familiar, y que no hace falta que compren una cosa nueva para sentirse bien.
Muchas veces los niños están muy expuestos a seguir las modas, ya sea desde la publicidad en tv o para sentirse integrado en su grupo de amistad ¿qué consejo darías a los padres para que sus hijos entiendan que seguir la última moda no es necesariamente lo mejor?
Creo que debe haber un diálogo muy cercano con los hijos, y debemos aprender a decir “no”. Estamos en una sociedad muy permisiva y eso les está haciendo mucho daño. Debemos poner límites ya que para ellos es muy sano de cara a su futuro, de esa manera aprenden a tener capacidad de frustración y entender que no se puede tener todo en la vida. Es muy importante tener diálogo con ellos para que entiendan que la negación no es mala.

¿Cuál crees que es el factor más importante por el que los padres debería decantarse por consumir ropa orgánica para sus hijos?
La piel es el órgano más grande del cuerpo y está expuesta a todos los efectos de los químicos de las prendas y los niños son los más sensibles a estos químicos. Aún la gente no es realmente consciente de lo que puede llegar a perjudicar ya que no existen estudios de esta afectación, pero la realidad está muy clara y esa afectación existe. Ese es el motivo más importante por el cual los padres deberían comprar ropa orgánica.
Algunos padres comentan que la ropa orgánica es cara ¿cómo podríamos las tiendas cambiar esta opinión?
Yo creo que la ropa orgánica no es cara, lo que es barato es la explotación de los recursos y de las personas. Algunos gobiernos están permitiendo que se pongan a trabajar 20 horas diarias a niñas de 14 años, que se contaminen ríos y lagos para obtener un beneficio económico que ni siquiera revierte en la sociedad.
No es que la ropa ecológica sea cara, la ropa ecológica tiene el precio que tiene que tener. La gente tiene que empezar a pensar que cuando compra ropa ecológica está invirtiendo en la salud de sus hijos, en un mundo más sostenible, en un futuro mejor. Mucha veces las marcas de ropa ecológica colaboran con asociaciones de preservación del medio ambiente, con cooperativas o con grupos en riesgo de exclusión social y eso es lo que le da a este tipo de ropa un valor añadido que los padres también deberían apreciar.
Y para acabar Gema, ¿nos podrías decir cuáles son las cifras más relevantes sobre la contaminación que genera el fast fashion?
Por ejemplo, para fabricar el tejido de una camiseta de algodón se consumen2700 lts de agua11000 para unos jeans. Esta agua queda contaminada debido a los tóxicos que transporta el mismo algodón y llega al mar ya que las purificadoras no lo pueden eliminar.  El 11% de los vertidos contaminantes y el 10% de las emisiones de CO2 provienen de la industria textil. Creo que esos serían los datos más destacables a tener en cuenta.
Muchas gracias por tu tiempo Gema, te deseamos mucho éxito.

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